Sentados en la cera de estas velas, muertas, dueñas de lo que fue, de las entre manos, de los pasos ahogados ...
Furtivos caminos, de lados incorrectos, humedad del suelo rústico en el que nos hallamos, alfombra de estos sueños, deslizados por los rincones, frente a los claveles, deshojados, por pasiones encubiertas ...
Dejando de la lado lo correcto, huéspedes de una habitación sin desierto, el reloj sin tiempo, marca el minuto incorrecto, tiempo de marchar, de negar la mirada, clausurar los peldaños, de estas escaleras, al recuadro, al listado de los pecados, atenuante frenesí incendiando ...
Del resto no recuerdo, prefiero olvidar, al preciso instante, donde las ramas de estos abrazos, se despojan, se marchan, se olvidan ... Del resto de los abrazos, resta menos de lo que esperamos, los nombres se han resbalado, las miradas nos han abandonado ... En este trance, restando los abrazos, nos marchamos, sin mirar al espacio, que hemos recortado ...
02/10/07